
Altea tiene historia y la tienes que ver. Íberos, romanos, musulmanes y cristianos pasaron por aquí y dejaron huella en sus calles, miradores y paisajes. Hoy, ese legado se mezcla con el encanto mediterráneo de sus casas blancas y la famosa cúpula azul.
Si te preguntas qué ver en Altea en 2025, esta guía reúne los lugares imprescindibles: desde el casco antiguo y las playas hasta mercadillos y excursiones cercanas.
Table of Contents
ToggleQUÉ VER EN ALTEA: LUGARES IMPRESCINDIBLES
Casco antiguo (El Fornet)
El corazón de Altea. Calles empedradas, casas blancas con balcones llenos de flores y miradores al Mediterráneo. El recorrido clásico empieza en la Plaça del Convent, sube por la Costera del Mestre de la Música y desemboca en la Plaza de la Iglesia, siempre animada con terrazas y música.
Puntos destacados:
Calle San Miguel, Fondo y Salamanca → las más fotogénicas, con talleres de arte y buganvillas en cada esquina.
Portal Vell y Portal Nou → antiguos accesos a la muralla medieval.
Plaza Carmelina Sánchez-Cutillas → homenaje a la escritora, junto al Portal Nou.
Torre y Molino de Bellaguarda → restos defensivos con mirador.
Plaza Francesc Martínez i Martínez (Mirador Blanco) → uno de los balcones más bonitos de la villa.
Más info en nuestra guía del Casco Antiguo de Altea.
Iglesia Parroquial de Nuestra Señora del Consuelo
La joya arquitectónica de Altea. Sus cúpulas azules y blancas son visibles desde kilómetros. Construida a principios del siglo XX, es gratuita de visitar. La plaza que la rodea está llena de terrazas donde disfrutar de un café o unas tapas.
3. Miradores de Altea
Mirador de los Cronistas de España: vistas espectaculares de la bahía y la Serra Gelada.
Mirador Blanco: para fotografiar el entramado de casas blancas.
Otros miradores escondidos entre las calles que sorprenden al paseante.
Paseo marítimo y playas
El Paseo del Mediterráneo recorre la costa con esculturas, jardines y terrazas frente al mar. Es perfecto para pasear de día o de noche, pero también para actividades náuticas. Desde el puerto deportivo salen excursiones en barco y catamarán, y puedes alquilar kayak o paddle surf para ver Altea desde el mar.
Playas principales:
Playa de la Roda → la más urbana, con juegos para niños y todos los servicios.
Playa de l’Olla → famosa por acoger el Castell de l’Olla en agosto.
Cala del Mascarat → aguas cristalinas, ideal para bucear y hacer snorkel.
Consulta la guía completa de playas de Altea.
5. Altea la Vella
Pequeño núcleo rural rodeado de olivos y almendros. Iglesia de Santa Ana, restaurantes familiares y rutas de senderismo. Perfecto para quienes buscan tranquilidad.
6. Altea Hills
Urbanización exclusiva con villas modernas y panorámicas al mar. Merece la pena subir solo por las vistas.
7. Cultura, arte y mercadillos
Altea es sinónimo de creatividad. En el casco antiguo abundan talleres de pintores, tiendas de cerámica y galerías de arte, herencia de su tradición bohemia. La Facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández ha convertido la villa en un centro artístico reconocido, y en verano músicos callejeros llenan las plazas de ambiente mediterráneo.
Los mercadillos son otra cita imprescindible:
Mercadillo de artesanía (verano, en la Plaza de la Iglesia).
Mercado semanal de los martes, con frutas, verduras y productos locales.
8. Excursiones desde Altea
Parque Natural Serra Gelada y Faro del Albir → senderos con vistas al Mediterráneo.
Calpe y Peñón de Ifach → excursión de medio día.
Itinerario: Altea en un día
Mañana: paseo marítimo y desayuno frente al mar.
Mediodía: subida al casco antiguo por la Costera del Mestre de la Música, visita a la Iglesia del Consuelo.
Tarde: miradores, portales históricos y comida en la Plaza de la Iglesia.
Atardecer: baño en la Playa de la Roda o excursión rápida a Altea la Vella.
Eventos y festividades
El calendario alteano está repleto de celebraciones:
Moros y Cristianos (septiembre) → declarados de Interés Turístico, con desfiles espectaculares.
Castell de l’Olla (agosto) → castillo de fuegos artificiales sobre el mar, uno de los más impresionantes de la Costa Blanca.
Festival Internacional de Jazz (julio) → más de 30 ediciones con artistas de renombre.
Fira d’Artesania (verano) → mercado nocturno de artesanía y diseño local.
Naturaleza y rutas
Más allá del casco y las playas, Altea es un punto de partida para la naturaleza:
Sierra de Bèrnia → ruta con túnel natural y vistas panorámicas.
Río Algar → paseo verde junto al agua, ideal para desconectar.
Kayak y paddle surf → remar frente a la bahía y contemplar el casco antiguo desde el mar.
Faro del Albir → sendero accesible en pleno Parque Natural de Serra Gelada.
Altea con niños y en familia
Planes tranquilos para los más pequeños:
Playa de la Roda con juegos y servicios.
Paseo del Mediterráneo para bici o patinete.
Actividades culturales y ferias infantiles en verano.
Excursiones fáciles: Faro del Albir, fuentes de Algar o Guadalest.
Vida nocturna tranquila
Nada que ver con la fiesta de Benidorm. En Altea la noche se vive con calma: bares de música en vivo en el casco antiguo, terrazas con vistas y pubs acogedores. En verano, conciertos al aire libre ponen la guinda sin perder el ambiente relajado.
Consejos prácticos
Calzado cómodo → las cuestas empedradas del casco antiguo lo exigen.
Hora ideal para visitarlo → al atardecer, con la luz dorada sobre la cúpula.
Playas de cantos rodados → lleva escarpines.
Parking gratuito → junto a la Facultad de Bellas Artes o en el puerto.
Accesibilidad → las calles del casco antiguo son empinadas, difíciles para carritos y sillas de ruedas.
PREGUNTAS FRECUENTES
¿Cuál es la mejor época para visitar Altea?
Primavera y otoño, aunque en verano cobran vida las playas y festivales.
¿Dónde aparcar?
En la zona baja, cerca del puerto o la Facultad de Bellas Artes.
¿Cuánto se tarda en subir al casco antiguo?
Entre 10 y 15 minutos caminando desde el paseo marítimo.
¿Se puede visitar la Iglesia del Consuelo?
Sí, la entrada es gratuita (respetando horarios de misa).
¿Qué excursiones cercanas hay?
Guadalest, Serra Gelada, Faro del Albir y Calpe son las más populares.
Conclusión
Altea es un destino imprescindible de la Costa Blanca. En un solo día puedes recorrer su casco antiguo, fotografiar la cúpula azul, asomarte a sus miradores y bañarte en el Mediterráneo. Pero si decides quedarte más tiempo, descubrirás un pueblo bohemio, lleno de vida cultural y con calidad de vida envidiable.
No te pierdas nuestras guías complementarias: